Cuando los ladridos nos desesperan


Lunes, 14 de Abril del 2008 -(RPP)

Los ladridos de los perros son muy bien recibidos ante cualquier situación de alerta porque nos permite estar prevenidos ante cualquier situación de peligro o alerta pero si se vuelven excesivos, sin causa aparente, causa molestias tanto a los dueños y sobre todo a los vecinos.

El ladrido es una forma de comunicación entre congéneres, la respuesta a un estímulo y un comportamiento natural de los canes pero si éstos ladran en demasía puede ser muy molestoso.

Si un perro ladra en exceso puede ser porque está enfadado, solo, aburrido, juguetón, estresado, asustado, atado o confinado o simplemente porque no ha sido educado correctamente. Para corregir esta circunstancia puede bastar con modificar el hecho que genera los ladridos o puede necesitar un adiestramiento.

En primer lugar se debe educar al perro en los comandos de obediencia básica (sentarse, quieto, caminar con correa) para que él aprenda a seguir órdenes. Luego usa el sistema de corrección del tirón con la correa cada vez que ladre. Para esto necesita un collar educativo y una correa; cuando el perro ladra, aplica un tirón firme para que el collar apriete un instante y luego aflojar, a la vez que dice NO con voz firme.

También es conveniente tener el collar y correa puestos para que pueda aplicar la corrección cada vez que ladre. Siempre hay que darle una caricia una vez que deja de ladrar porque refuerza la orden y hace que el perro se sienta gratificado.

También se recomienda usar una pistola de agua o un sonido desagradable para crear una asociación negativa con el ladrido. En este caso cada vez que el perro ladra sin sentido le dispara un chorro de agua en la cara o hace el sonido (puede ser una lata con monedas, una bocina fuerte, una especie de corneta, cualquier cosa que lo sobresalte). Una vez que pare, le da su premio de caricias o algo que le guste comer.

Una situación diferente se plantea en el caso de los perros que ladran cuando se quedan solos. Aquí se debe educarlo para vencer el miedo o la angustia al quedarse solo. Se hacen salidas muy cortas que se van alargando en la medida que el perro progrese, se le deja música o una radio encendida. Si debe ausentarse por muchas horas conviene buscar alguna persona que le de un paseo largo o que venga a pasar un rato con él para acortar la espera. Hay también collares antiladridos que pueden ayudar mucho en este caso, pues se activan cada vez que el perro ladra arrojándole un spray de agua en la cara.

Pero si su perro ladra porque es muy nervioso consulte con su veterinario para ver recomienda alguna medicación para calmarlo.

Tenga paciencia, ante todo, y constancia hasta conseguir los resultados esperados para que de esta manera se mejore la convivencia con él y la gente que rodea a la mascota.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Voy a imprimir esto y se lo daré a Bico para que lo lea detenidamente.... Antes le voy a tenert que enseñar a leer.

Anónimo dijo...

Menuda indirecta....

Anónimo dijo...

Hola. Yo le compré a mi perro un collar antiladridos que me recomendaron y me va genial, ha aprendido a no ladrar cuando no debe. Por si os interesa esta es la web donde lo compré:
www.nomasbichos.com
Saludos.